¿Alguna vez te has parado a pensar por qué nos enfocamos en los pensamientos negativos? ¿Sabías que tener pensamientos negativos tiene su efecto rebote para nuestro cerebro?
De ahí la frase "lo que piensas atraes".
La neurociencia muestra que los etímulos negativos provocan respuestas más grandes en el cerebro que los positivos, lo que explica por qué tendemos a enfocarnos más en los eventos negativos.
La psicología de la aversión a la pérdida nos muestra que nuestras pérdidas son 2,5 veces más poderosas que nuestras ganancias.
Entonces si recibes un comentario negativo en una publicación, pero recibes dos comentarios positivos, lo más probable es que te vayas a dormir pensando en lo negativo.
Reconocer el sesgo de la negatividad de nuestro cerebro ya es un gran paso para comprender por qué nos detenemos en estos eventos, para que podamos trabajar en cómo no hacerlo en el futuro.
Siempre que no estén en un estado directo de lucha o juida (adrenalina alta), mentalizarte en lo positivo puede cambiar tu forma de pensar,lo que con el tiempo te llevará a verte menos afectado por los eventos negativos.
En cambio, enfocarte y detenerte en los eventos negativos fortalecerá las vías neuronales de tu cerebro para el pensamiento negativo y la preocupación.
Si te encuentras en un estado de lucha o huida, necesitarás disminuir tu ritmo cardíaco antes de poder cambiar tu forma de pensar.
Es muy difícil que te saques de una situación negativa cuando tu nivel de adrenalina es alto, es como tratar de estar tranquilo cuando te persigue un león.
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